Ramón
González Figueroa nació en la A Coruña en 1898 y a los 16 años
comenzó a jugar en el Fabril, siempre de interior, pasando al
Deportivo en 1917. En 1918 marcha al Real Vigo, que después se
fusiona con el Fortuna, naciendo el Celta. Juega allí hasta 1923 y
tras la fusión con el Fortuna, Ramón González, junto con
Chiarroni, Otero e Isidro ficharan por el Deportivo motivando así
uno de los primeros enfrentamientos con el club de Vigo, ya que los
jugadores no estaban conformes con la nueva disciplina del Club,
serán acusados de desertores. La federación Gallega en asamblea
celebrada el 10 de noviembre de 1923, declaró por 15 votos contra 5,
la culpabilidad del Deportivo y aunque la federación Española
intento mediar y evitar la sanción, la Gallega no cedió; aun así
la prohibición de jugar en el Deportivo para estos futbolistas fue
reducida hasta el final de la temporada 23-24.
Polémicas
a parte, Ramón González salio de la cantera del Deportivo y fue uno
de los mas grandes jugadores del fútbol coruñés. Marcaba goles con
una facilidad que solo muestran los verdaderos ases del balón. El
marcaje mas severo que sufrió Ramón González fue en un partido
contra el Celta que se celebro en Riazor el 6 de febrero de 1927. A
pesar de ello, Ramón González maro un esplendido gol “a medias
con Chacho” y el Deportivo se proclamo, así campeón de Galicia,
ganándole al eterno rival.
Que
Ramón González no fuese convocado para la olimpiada de París sentó
muy mal entre los aficionados deportivistas.
Jugaría
en el Deportivo hasta su retirada en 1930